miércoles, 4 de noviembre de 2009

Soledad

Es curioso, pensar que hace unos meses me compadecía de aquellos que decían estar enamorados... ¡Quién me iba a decir a aquellas alturas que yo mismo sería, más tarde o más temprano, uno de ellos! Y es justo hoy en día, cuando me doy cuenta de que, en absoluto, tiene nada de malo. Solamente hay un caso excepcional: cuando no se es correspondido. Ahora bien, éste puede ser de diversas clases. Puede suceder que mantenga algún tipo de relación con otra persona. Es entonces cuando no hay nada que hacer al respecto. O bien, como, afortunadamente, es mi caso, que la susodicha persona no vea o, más bien, no quiera ver la realidad de la situación; o, por otra parte, haya decidido arbitrariamente no actuar al respecto. En estos casos, cada día que transcurre es, en efecto, una nueva oportunidad para que cambie de idea, que cambie de opinion, de parecer, que comience a ver la que podría ser la nueva realidad; y, de esta forma, mejorar no únicamente tu vida, sino también la suya propia y la de varias personas a vuestro alrededor. Sin embargo, a medida que se suceden los días, te das cuenta de, aún sin llegar a perder el mínimo atisbo de esperanza, que tu destino quizá sea el estar, como ya cantó en su día "The Police", so lonely por siempre jamás...

No hay comentarios:

Publicar un comentario